PATATAS 🍟🥔
Ojo, ojo, ojo.... que aquí hacen el triple mortal con tirabuzón de las bravas hojaldradas. Y es que.... (redoble de tambores) ¡las hacen con Monalisa! O sea que, el resultado, aparte de crujiente, ¡es muuucho más dulce! Lo tienen todo.
La técnica es muy parecida a la fórmula original de Marc Gascons: mandolina, horno mixto, presión, cortar en sticks... peeero... luego los cortan en daditos, de manera que se obtienen unos cubos con estratos, que incluso pueden recordar a la estructura de la yuca.
SALSA 🌶🔥
Esta salsa roja me pareció fuera de serie. Muy grumosa, buscando un estilo 'rústico', que se elabora a partir de un sofrito, tomate bien reducido, pero con el marcado carácter de un pimiento asado al Josper (que reina en la cocina). También se añade ñora, insistiendo en las raíces y, finalmente, el fuego lo pone la guindilla. No pica mucho, los que seáis fanáticos del picante, quizá lo echéis de menos.
Allioli (ajonesa) de ajos rustidos, también en el maravilloso horno, de un color crema-beige, muy suavecito.
El cebollino que llevan por encima es más decoración que un topping.
RESEÑA 🍻🍴
Me da un poco de rabia desvelar el secreto que se oculta en la ollita roja que te llega la mesa. Estoy quedando como un mero aguafiestas. La cara de sorpresa de los comensales al levantar la tapa es un poema. No paran de servirlas, es un desenfreno.
Lo que más mola es la historia detrás del nombre del local, y el link que han establecido los propietarios con el pasado industrial del barrio. Mirad las referencias que cuelgan de las paredes. No sé si son más militantes del vecindario, o del producto de temporada.
¡Ah! Tienen un precioso salón privado que debéis pedir que os lo enseñen. Me pareció muuuy chulo.
Precios muuuy razonables. No me extraña que llenen siempre.